En diálogo con Pase lo que Pase, el dirigente dijo que desde la multitudinaria marcha que se dio en 2024, “no cambió demasiado la situación”, y que pese a que “a partir de las marchas pudimos lograr que no se cierre la universidad, también que docentes y no docentes de primera categoría tengan garantizado su salario”, pero que de todos modos “el conflicto no está resuelto”.
Seguido, advirtió que “los docentes y no docentes tienen que elegir otro trabajo porque el salario no alcanza”, y agregó que “los estudiantes no pueden sostener el alquiler, cuesta mucho llegar a fin de mes y acceder a un plato de comida digno. Porque más allá de que la UNLP escuche nuestros reclamos, necesitamos más presupuesto”. En ese sentido, subrayó que “es muy difícil acceder a los materiales de estudio y al boleto, que a pesar de que la Provincia financia toda la tarifa, los aumentos de las empresas son constantes. La necesidad económica lleva a que los compañeros tengan que tomar dos o tres trabajos y terminan dejando la carrera”.
Finalmente destacó: “Venimos articulando muy bien con docentes y no docentes sobre cuáles son las estrategias de visibilización, movilización y de generar organización para dar la pelea desde el Frente Gremial Universitario”.