En diálogo con La siesta es sagrada contó “que a las 4 de la madrugada del lunes me llama un cardenal amigo y no podía creer lo que me estaba diciendo. Tenía una tristeza grande por la pérdida de Francisco, pero una alegría bárbara de saber que está con Dios”.
Seguido informó que las exequias públicas serán hasta el viernes, y el sábado será la de carácter privado. La ceremonia ritual tendrá algo novedoso, el Papa va a ingresar a la Basílica de San Pedro y de ahí será trasladado a la Iglesia Santa María la Mayor, donde pidió descansar. Es algo novedoso que haya un cortejo fúnebre que se va a trasladar por buena parte de Roma”, recalcó.
Tras destacar que hay hasta 17 cuadras de cola para despedir a Francisco, aseguró que el Papa “es muchísimo más valorado de lo que nosotros creamos acá en la Argentina”.
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