En contacto con TER por Radio Provincia, el joven contó sus sensaciones tras haberse recibido de arquitecto y destacó el rol de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) y el Programa de Respaldo a Estudiantes de Argentina (Progresar) del ministerio de Educación. “Llegue a la facultad a los 18 años desde Salta, quise cursar en la UBA pero no me coincidían los horarios con el trabajo”.
En este sentido, el entrevistado mencionó que cuando se  enteró que en la UNSAM  era gratis la carrera “me anoté, era ese el primer paso para lograr lo que quería”.  Alejandro Montero, es el primer universitario de su familia contó que como arquitecto soñaba con remodelar su casa. “Le quería hacer los planos para refaccionar el hogar a mi mamá”.  
El oriundo de General Güemes, Salta, puntualizó que “cuando se anotó en la universidad pública lloró de felicidad. Por suerte pude tener la ayuda del Estado con Progresar para poder pagarme los materiales”.
Montero, resaltó el proyecto Hábitat y Hábito, con el cual se recibió y explicó que “busca un lugar propicio no solo para vivir bien, sino también crear espacios que puedan sustentar las necesidades en la infancia. Incorporando el espacio público a lo urbano”.